Aire Libre 105.3 MHz, la estación comercial de más reciente ingreso a la FM capitalina, producto de la evolución tecnológica, la política regulatoria del IFT y también el concepto con el que Más Radio Telecomunicaciones entró al mercado de la Ciudad de México, como nuevo grupo radiofónico en noviembre de 2018, ha comenzado a atraer oyentes de manera constante en sus apenas seis meses al aire y a cinco meses de que completó su programación con contenidos noticiosos, hablados y sobretodo, con música en vivo dirigida al segmento juvenil.

En tanto sus números de escuchas, share y rating se vuelvan consistentes, por ahora y de acuerdo con la casa de mediciones de audiencia en radio INRA, la novedad está en que Aire Libre –propiedad del empresario automotriz Eduardo Henkel, pero administrada por el grupo Más Radio y operada en el día a día por el productor José Álvarez– tuvo en febrero más oyentes que 33 frecuencias de la AM/FM capitalinas y superó los datos de estaciones públicas o sociales como Radio UNAM, Opus, Horizonte o Ibero 90.9 y comerciales de gran calado entre los escuchas, como las legendarias XEW, Radio 620 o Radio Red AM y de otras no tanto, como la Ke-Buena AM, Romántica 1380, Radio Felicidad y ABC Radio, del poderoso grupo mediático OEM.
Quien debiera estar más preocupado por el desempeño de la señal comercial Aire Libre 105.3, es el medio público Reactor 105.7, que pese a no tener conceptos iguales, ambos sí buscan que los jóvenes los escuchen en una era en que ellos prefieren ocupar sus oídos en otras plataformas de contenidos audiovisuales. Reactor ya va por los 15 años queriendo permear en los públicos juveniles y como ahora hace Aire Libre, también ha abierto sus micrófonos a talentos jóvenes.
Y las complicaciones podrían crecer para Reactor –en titularidad del Instituto Mexicano de la Radio– por estar en el dial de la FM a lado de Aire Libre y entonces el escucha puede alternar entre una y otra estación; y preferir más fácilmente con cuál de los conceptos se queda en definitiva. Ese es un hecho que ya ocurrió en diciembre de 1998, cuando por una situación muy parecida, Grupo Radio Centro decidió “mover” al entonces Sonido Z de la señal del 92.1 al 107.3, porque junto estaba –y ahí sigue– la Ke-Buena 92.9, que peleaba a su competencia el mismo público las 24 horas del día. Hoy, ambos conceptos se alternan el 1-2 de las estaciones más escuchadas de toda la radio de la Ciudad de México.
La firma INRA indica que Aire Libre 105.3 tenía en enero de 2019 una audiencia neta de 13,257 personas y ese número creció a 17,461 oyentes netos en febrero, aproximadamente 31.71 por ciento. En el mismo lapso, Reactor 105.7 avanzó 0.9%; de 23,620 a 23,838 escuchas únicos.
INRA expone que a Reactor ha comenzado a complicársele el hecho de mantenerse atractivo en el segmento A/B de población y en general entre el público masculino, esto en la comparativa diciembre 2018 a febrero 2019; y lo mismo ocurre en los públicos con edades que van de los 18 a 24 años, de 25 a 34 y de 35 a 44 años de edad, los segmentos objetivos de Reactor, pues aunque algunos de esos números significan variaciones positivas, éstos no se notan tanto como los datos de Aire Libre y en este caso, respecto a su propia proporción de escuchas. Y todo lo anterior, descontando factores estacionales como la temporada de Navidad que modifica los hábitos de los escuchas para con la radio.
Reactor 105.7, sin embargo, se mantiene como la estación más escuchada de todo el Instituto Mexicano de la Radio (Imer); siendo también la emisora número 27 más seguida de toda la AM/FM, mientras que Aire Libre viene más atrás, en el lugar 31 durante febrero pasado.
En seis meses al aire, la XHINFO-FM 105.3 MHz se mueve por las ondas de radio hacia los hogares, autos y el trabajo. En enero tenía 0.08 puntos de rating y en febrero Aire Libre lo había subido a 0.127 puntos; su alcance neto era entonces de 75,005 personas, todavía inferior a las 142,713 de Reactor.
Pero quien tiene mejores oportunidades de crecer entre las audiencias, al menos en lo que toca a los parámetros técnicos, es la radio pública Reactor 105.7 FM.
Esa señal es una estación de clase “B”, que le permite transmitir a mayor distancia y potencia de transmisión –hasta 27 kilómetros y con 50,000 watts de potencia promedio–, en comparación con las posibilidades técnicas de Aire Libre –24 kilómetros y 3,000 watts como base–, por ser una frecuencia para clase “A” que fue resultado de un plan del IFT para ampliar la banda de FM de la capital con el fin de meter más voces de radios públicas, sociales y comerciales y sin que ocurrieran interferencias técnicas con frecuencias próximas.
Ahora, Aire Libre pelea en la señal de espectro de a lado y dirigida por el creador deRadioactivo 98.5 que un día inspiró la creación de Reactor 105.7, los públicos jóvenes a la estación líder en audiencias del Imer, que como su eslogan lo dice deberá buscar “todas las alternativas” para no caer ante la XHINFO-FM 105.3 MHz.
“Aire Libre” transmite desde el 1 de noviembre de 2018 por la XHINFO-FM 105.3, concesionada desde mediados del 2017 al empresario Eduardo Henkel del Grupo Bavaria, entonces concesionario de la 1560 XEINFO-AM que un día fue de José Gutiérrez Vivó y que por política regulatoria logró imponerse a otros grupos radiofónicos para poder migrar su estación de AM a una de FM.
Henkel está obligado a devolver al Estado la señal de la 1560 de amplitud modulada un año después de iniciadas las transmisiones de la emisora en la banda de frecuencia modulada, que será en noviembre de 2019.
Henkel y Más Radio Telecomunicaciones convinieron en 2018 un acuerdo comercial en el que el primero aporta la señal de espectro y el segundo opera y comercializa la frecuencia con un producto de contenidos noticiosos y de entretenimiento en vivo que también alcanza a la 94.7 FM de Tulum, propiedad de Más Radio. (El Economis,ta Mexico)