El primer satélite boliviano, el «Túpac Katari», fue lanzado desde la base espacial de Xichang, en el suroeste de China, donde la operación fue seguida por el presidente de Bolivia, Evo Morales, y los ministros de Planificación, Relaciones Exteriores y Defensa.

Decorado con la bandera nacional boliviana y la wiphala (enseña de los pueblos andinos), el satélite pudo lanzarse a la hora prevista, pese a las bajas temperaturas de 6 grados bajo cero y la nieve que caía en la zona. Horas antes del lanzamiento del satélite, el presidente Morales había destacado en Pekín el momento histórico que supone para Bolivia el lanzamiento. El satélite, que orbitará a 36.000 kilómetros de altura, tiene como principal finalidad mejorar las telecomunicaciones de Bolivia y ha supuesto una inversión de 302 millones de dólares, financiados en un 85 por ciento con un crédito del Banco de Desarrollo de China, mientras el resto corre por cuenta del Estado boliviano. Será operado desde dos estaciones de control: una en Amachura, en la ciudad de El Alto, vecina a La Paz, y la otra, inaugurada este 19 de diciembre, en La Guardia (departamento de Santa Cruz).

Con un peso de 5.200 kilos y una vida útil de 15 años, el «Túpac Katari», bautizado con el nombre del líder que se rebeló contra el imperio español en el siglo XVIII, beneficiará sobre todo a áreas rurales de Bolivia, a las que facilitará el acceso a internet y brindará apoyo en programas de educación a distancia.
Cuatro empresas estatales y tres privadas ya adquirieron por adelantado los servicios del satélite boliviano Túpac Katari, según informó el ingeniero en aplicaciones de la Agencia Boliviana Espacial (ABE), Marco Antonio Torrico, al diario local El Deber. Los montos de los contratos no fueron revelados. El principal cliente del satélite –lanzado el pasado viernes 20 de diciembre– será la telefónica estatal Entel, pero también utilizarán sus servicios la Aduana Nacional, la Agencia Nacional de Hidrocarburos, YPFB Transportes, y los operadores móviles privados Viva (Trilogy International Partners), Tigo (Millicom) y la Cooperativa de Telecomunicaciones Santa Cruz (Cotas). El Gobierno también mantiene conversaciones con empresas mineras interesadas en el servicio, según el funcionario.
Los propulsores llevaron al Túpac Katari a unos 36.000 kilómetros de la superficie terrestre, donde tomará órbita en la línea del Ecuador a 87,2 grados de longitud oeste (87.2º W). El artefacto es de tipo geoestacionario y tiene un tiempo de vida mayor a 15 años. El artefacto estará en período de pruebas durante tres meses, y se espera que en marzo de 2014 se encuentre ya en operaciones.Los objetivos del proyecto satelital Túpac Katari son proveer transmisión de datos para Internet, televisión, telemedicina y educación a distancia, especialmente en lugares remotos de Bolivia, cuyo territorio es de aproximadamente 1,1 millones de kilómetros cuadrados y que cuenta con una población de unos 10 millones de habitantes.El satélite fue construido en China, por la Academia China de Tecnología Espacial CAST en torno a la plataforma DHF 4, con partes provenientes de fábricas de Francia, Alemania y Estados Unidos. De acuerdo con información de la Agencia Boliviana Espacial (ABE), tendrá 110 baterías de níquel, dos paneles solares, guías de onda, cohetes, tanques de combustible y 30 transpondedores (cuatro de ellos para broadcast) que transmitirán en las bandas C, Ku y Ka. Su peso es de 5,1 toneladas y su longitud es de 28 metros de extremo a extremo con los paneles solares completamente desplegados. Tiene una potencia eléctrica de 10 kilovatios. En un hecho histórico para el país, el pasado viernes 20 de diciembre Bolivia ingresó a la era espacial, con el lanzamiento de su primer satélite, el Túpac Katari (TKSAT-1). –
